El cementerio fue creado con una forma octagonal atravesado por dos pasillos perpendiculares entre si y cuyo perímetro estaba definido por una gran muralla de adobe. Debido a la gran demanda de sepulturas, éste debió ampliar sus terrenos y la forma octagonal se ha ido perdiendo debido al crecimiento, que se ha dado bajo el orden de una cuadrícula.
La intención en cuanto al tamaño de la obra en el cementerio se dirige a plasmar la histórica forma en base al largo de una de sus caras, aquella en la que remata el pasillo principal, tomándose como punto de partida los nichos más antiguos, hitos del cementerio, hasta el vértice oriente de aquella cara. Es así como se le da un tamaño justo al proyecto en relación al cementerio.